La preocupación por llevar una vida sana y adoptar hábitos ecológicos y saludables cada vez está más extendida. Esto hace que cuidemos mucho más lo que comemos, y que la mayoría de nosotros prefiramos consumir más alimentos de origen vegetal en detrimento de aquellos alimentos que proceden de animales.
Además, la aparición de estudios científicos que confirman que muchos problemas de salud están provocados por tomar alimentos de origen animal, ha hecho que seamos más cautelosos a la hora de ir a la compra, logrando que estemos introduciendo nuevas variantes en nuestras pautas de alimentación.
Uno de los alimentos más polémicos en este sentido es la leche y sus derivados lácteos. Por eso, mucha gente hoy opta por las leches vegetales. Estas leches vegetales son variadas y la mayoría de ellas tienen un excelente sabor, lo que hace que, además de sanas, gusten más a niños y a mayores. Nutricionalmente una leche vegetal aporta un sinfín de beneficios a nuestra salud, son recomendadas para las personas que sufren de colesterol y, por lo general, provocan menos alergias e intolerancias alimentarias.
¿Cuántos tipos de leches vegetales podemos encontrar?
Existe una amplia oferta en cuanto a tipos de leches vegetales. La más antigua y más conocida es la leche de chufa. Pero también están las leches de almendras, de avena, de coco, de avellanas, de arroz, de soja y de quinoa. Veamos qué nos aporta cada una de ellas.
Horchata de chufa
Seguro que cuando eras niño tomabas horchata fresquita para merendar en las calurosas tardes de verano. Pero hay que aclarar que debemos aprender a diferenciar entre la bebida de chufa y la leche de chufa porque, si bien ambas se elaboran con chufas, solemos confundirlas habitualmente y no son la misma cosa.
Desde el punto de vista nutricional, ambas opciones son recomendables, la diferencia, sin embargo, está en que a la leche de chufa se le ha añadido calcio, con lo cual se asemeja más a la leche, siendo un alimento más completo.
La horchata es un alimento muy apreciado en diferentes partes del mundo y se lleva consumiendo miles de años. Ya en la época egipcia la chufa era considerada como un superalimento.
Se elabora principalmente con chufas, las cuales proceden, en su mayoría, de África, aunque son conocidas especialmente las chufas de Valencia. Sin embargo, en otras partes del mundo también se utilizan otros ingredientes como el ajonjolí en Cuba, Puerto Rico y Venezuela; la cebada en Malta, Italia y Francia; o la avena en México.
Entre las propiedades de la leche de chufa podemos destacar:
- Digestiva
- Astringente
- Prebiótica
- Inmunológica
- Estimulante
- Antioxidante
- Reconstituyente
- Buena para el corazón
- Aporta gran cantidad de fibra
- Rica en calcio, hierro y otros minerales
- No contiene gluten
Leche de soja
Es la más conocida de las leches vegetales junto con la horchata. Es muy recomendada para personas con estreñimiento, por su alto contenido en fibra y para las mujeres gracias a que contiene fitoestrógenos. Otras propiedades de esta leche son:
- Rica en proteínas de alta calidad
- Contiene isoflavonas con genisteína que bajan el colesterol y los triglicéridos
- Es digestiva
- Rica en grasas saturadas y, por lo tanto, buena para el corazón
- Apta para diabéticos, porque mantiene los niveles de glucosa en sangre
- Rica en potasio, por lo que ayuda a eliminar líquidos
Leche de almendra
Es una de las leches vegetales más calóricas, sin embargo, también es de las más saludables por todos los beneficios que aporta, como por ejemplo:
- Digestiva
- Energética
- No contiene gluten, por lo que es apta para celíacos
Se elabora con la almendra pelada y seca mezclada con agua. Pese a que las grasas que posee son insaturadas y cardiosaludables, las personas con obesidad deben moderar su consumo. ¿Algún defecto que podamos encontrar a la leche de almendras? Su bajo contenido en calcio. Sin embargo, la solución está en comprarla enriquecida.
Leche de arroz
Destaca de ella su bajo contenido en grasas y, por el contrario, su gran aporte en hidratos de carbono. Además:
- Es la más digestiva y ligera de las leches
- Apta para diabéticos
- Apta para las dietas de adelgazamiento
Si eres alérgica o alérgico a la leche de vaca y soja, esta leche es tu opción perfecta. Además, te ayuda a guardar la línea. Solo le encontramos un ‘pero’, y es su bajo contenido en calcio.
Leche de avellana
Sus propiedades son similares a los de la leche de almendras, con la diferencia de que la leche de avellana aporta muy poca proteína.
Leche de avena
Lo más destacado de ella es su alto contenido en proteínas, el mayor de todas las leches vegetales, junto con la bebida de soja. Por otro lado, si eres celíaco, es preferible que optes por otra variedad. Destacamos también que:
- Es muy digestiva
- Rica en vitamina B
- Baja en sodio
- Rica en fibra
Leche de coco
Es la leche que contiene más cantidad de grasas saturadas y también muy rica en fibra. Se usa para elaborar batidos saludables porque no tiene colesterol.
Leche de quinoa
Muy aconsejada para mujeres lactantes porque ayuda a la producción de leche. Y para personas con depresión por su alto contenido en litio. Además:
- Es rica en vitaminas B, E y C
- Muy rica en proteínas
- Muy digestiva
- Apta para celíacos
¿Estás a dieta? La leche de quinoa es muy saciante, así que apúntate a ella.
Las leches vegetales ¿son siempre saludables?
Si decides pasarte a las leches vegetales para cuidar tu salud, debes saber que su procedencia vegetal no siempre nos garantiza estar consumiendo un producto sano. Fíjate en las etiquetas de los envases porque, si una leche lleva azúcares añadidos, colorantes, espesantes o conservantes, esta opción ya no es tan saludable. Ante la duda, puedes probar a elaborar en casa tus propias leches vegetales.
Como has visto, la variedad de leches vegetales es tan amplia que existe una leche adaptada a cada una de nuestras necesidades. Tan solo ten la precaución de revisar bien qué ingredientes y añadidos lleva cada una, para elegir la que más te convenga. Y si puedes prepararla en casa siempre será mucho mejor.